Marcos Ledesma, otro docente que vivió un calvario por una denuncia que era mentira
En un fallo considerado como histórico para cientos de especialistas que lo siguieron, el Tribunal Oral Criminal N°5 de La Plata, integrado por la jueza Carmen Rosa Palacios Arias y los jueces Ramiro Fernández Lorenzo y Ezequiel Augusto Medrano, absolvió a Marcos Esteban Ledesma de las graves acusaciones en su contra por las que estuvo procesado durante 11 años, y una parte de ese tiempo detenido injustamente.
El educador había sido imputado por múltiples delitos de abuso sexual agravado y corrupción de menores dentro de un jardín de infantes, en donde ejercía su profesión. Sin embargo, luego de un debate que se extendió por varias semanas, la decisión de la justicia fue contundente: no sólo que no hubo elementos de prueba para condenarlo sino que, además, fueron inválidas varias de las herramientas mediante las cuales se sostuvo la imputación.
En medio del juicio, una mamá denunciante se quebró y confesó que su hija mayor era abusada por el padre en su propia casa y que había una denuncia penal en contra de ese hombre. Fue un cimbronazo
Entre otras cosas, las declaraciones de las presuntas víctimas, tomadas bajo la modalidad de cámara Gesell, fueron excluidas debido a “serias irregularidades” en su obtención. Según los magistrados, las entrevistas no cumplieron con las garantías procesales necesarias, lo que afectó el derecho de defensa y el debido proceso del imputado.
Además, se cuestionó la metodología empleada en las entrevistas a los niños y niñas por una perito psicóloga Silvina Catera. El tribunal consideró que las técnicas utilizadas por esa profesional a cargo de tomar sus testimonios y por el fiscal Álvaro Garganta, que llevó la instrucción del caso, estuvieron “plagadas de sesgos confirmatorios, preguntas sugestivas y manipulación”. Estas irregularidades llevaron a la exclusión de dichas declaraciones como prueba en el juicio.
Una denuncia que comenzó en 2013 y el fin de un calvario
En cuanto a los hechos imputados, el tribunal concluyó que no se logró acreditar la hipótesis acusatoria con el nivel de certeza requerido para un fallo condenatorio. Según el juez Ezequiel Medrano, “las pruebas restantes no robustecieron los extremos por los cuales se elevó la causa a juicio”.
El caso Ledesma, que comenzó con denuncias de padres y madres en 2013, marcó un precedente en el análisis crítico de las pruebas en procesos penales que involucran a menores. El tribunal reiteró la necesidad de un abordaje adecuado y respetuoso hacia las víctimas para garantizar la validez de las pruebas sin vulnerar los derechos de los imputados. En sus alegatos, la Fiscalía había pedido 38 años de prisión para Ledesma, mientras que el abogado de una de las familias denunciantes solicitó 50 años de cárcel.
“Nosotros siempre creímos en Marcos porque las cosas que dicen que pasaron dentro del jardín es imposible que sucedan. Un jardín es un lugar cuidado, atendido, los docentes están siempre con los chicos, hay preceptores, y no hay posibilidad alguna para mentes pervertidas adentro del jardín. Adentro de un jardín no hay tiempo para cometer ninguna perversión”, afirmó Vilma Filippi, titular de la Unión de Docentes Bonaerenses (UDEB) al programa ‘De qué lado estás’ por Radio La Plata (FM 90.9). Queda clara la trascendencia del involucramiento de las organizaciones sindicales para sostener a educadores denunciados.
En tanto, la abogada Patricia Perelló, defensora del acusado, reflexionó ante la consulta de Primer Plano Online: “este caso tuvo tramitación durante tanto tiempo por la negligencia de los operadores de justicia que actuaron desde el inicio: fiscal, perito, jueces de Garantías, y la realidad es que esto nunca debió haber llegado ni siquiera a un debate oral si estos funcionarios hubieran actuado como corresponde”.
“Los jueces dictaron un fallo que es impecable, donde Marcos Ledesma queda libre de culpa y cargo de todos los delitos por los que fuera acusado. Estamos muy conformes porque es lo que correspondía más allá de que 11 años para la vida de una persona es muchísimo. Este caso refleja toda esta enfermedad social que hay de parte de algunos padres y madres con respecto a esta falsa creencia de que los docentes son abusadores. La justicia le puso un límite”, concluyó.
Las preguntas inducidas durante las cámaras Gesell a niñas que descalificó el tribunal como prueba
A continuación, con los resguardos del caso en relación a la identidad de menores, Primer Plano Online reproduce algunos ejemplos de las preguntas realizadas por la perito psicóloga en la instrucción del expediente. Esos testimonios fueron desestimados por la justicia, pero luego de 11 años.
-Licenciada Catera a presunta víctima: “…Hagamos un trato, vos me contás y después jugamos…”; “…¿me podés contar que te pasó? todo desde el principio hasta el final qué pasó en el jardín…”; “…yo me enteré que pasó algo feo en el jardín…»; «…¿me podés contar que pasó? ¿No te acordás nada, nada?; ¿Tenés miedo de contar?, ¿Te acordás que le contaste a tu mami?, ¿Que cosas hacías con el profesor?; ¿Te pasó algo feo?…”
-Licenciada Catera a otra presunta víctima: “Álvaro es un señor que se llama fiscal que está muy preocupado por lo que a vos te pasó en el jardín y él te quiere ayudar. Hicimos un trato vos y yo…”; “… ella me va a contar todo lo que me pasó en el jardín…”; “…¿Querés hacerlo con el muñeco?. Mostrame como el profesor Marcos te tocó la chuchi...”; “…¿Por qué tendría que estar preso el profesor Marcos?…”; “…leí lo que tu mamá le dijo a Alvaro. Le dijo que el profesor Marcos te había pegado cachetadas y te había tocado la cola. ¿Eso es verdad?…”; “…Vos dijiste que el profesor Marcos te tocaba en el SUM, ¿es cierto eso?…”; “… ¿Tenía biombos, títeres?…” “…¿Cómo es que te tocó la chuchi, me querés mostrar vos a mí?”
-Licenciada Catera a presunta víctima: “…contanos por qué viniste acá. Contanos si pasó algo feo. Estamos muy preocupados, tenemos ganas de ayudarte, porque sino nos contás no podemos ayudarte…”; “…estamos muy preocupados y queremos ayudarte pero si no nos contás no vamos a poder…”; “…yo leí que vos le contaste a tu mamá que en el jardín vos jugabas a un juego del perrito ¿Eso es verdad? ¿te acordás como es el juego del perrito? ¿te acordás de algún juego?…”; “…¿querés contarme qué te pasó en el jardín? te voy a preguntar por última vez…”; “…¿tenés miedo?…”.